_Parshat Bamidbar_ *Una montaña no puede ser pisoteada*

_Parshat Bamidbar_

*Una montaña no puede ser pisoteada*

El hombre es un animal terrestre y como tal, en ocasiones olvida de donde viene, atraídos a ella por la fuerza de gravedad, le debemos nuestra alimentación incluso Di-s arma en Bereshit a Adam como a un muñeco de barro, es la materia prima original y es nuestro destino final. “Del polvo vienes al polvo volverás”.
¿Y cómo nos comportamos con esa superficie? La pisoteamos, escupimos y excavamos. “Estoy por el piso” decimos. A diferencia de la llanura, una montaña nos causa impresión, asombro y maravilla, el que tuvo oportunidad de visitar alguna sabe de lo que le hablo. ¿Cuál es la diferencia? El suelo está debajo nuestro y por eso lo pisamos, está debajo de nuestra línea visual.
La Torá se nos entregó en una montaña para que sepamos que así debemos ser nosotros, no dejarnos pisotear, no tirarnos abajo, pararnos orgullosos. Sinaí era una montaña baja, humilde, pero era una montaña.
La “Tierra” de Israel es nuestra y de nuestros padres hace miles de años, cuando uno se empequeñece, se deja pisar, la gente va a hacer eso, porque literalmente no lo ve, no te registra.
En una época enferma de corrección política los que salen ganando son los extremistas, los que aprovechan nuestro “humanismo” para decirnos que la línea entre el bien y el mal es difusa. Ante la duda, gana el más fanático.
La Torá nos cuenta que las bendiciones y su opuesto fueron entregadas entre dos montañas enfrentadas, al día de hoy Monte Gerizim, (Bendiciones) es un monte florecido, Monte Ebal (Maldiciones) es un monte seco. ¿Cuál es el mensaje? Lo que está bien *está bien* y lo que está mal *está mal*.
Claro que nos duele que se pierdan vidas y de cada bando, pero ¿Cuál es la mejor estrategia para evitarlo? ¿Ceder? ¿Entregar tierras? ¿Alguna vez funcionó?
Las montañas tienen que poder ser vistas.
El mensaje es universal y personal. *Sos una montaña, no te arrastres por el suelo.* No seas como aquel que compró pasaje en primera clase pero está viajando  clandestinamente debajo del asiento.
Unos son terroristas y buscan muerte y aniquilación, otros profesan, protegen y propagan la vida. Está claro como una montaña. Como el monte Sinaí.

Shabat Shalom
Iosi Levy


Dr. Guido Maisuls
Servicio judío de opinión e investigación periodística
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