“Israel nunca aceptará ningún intento de la CPI de socavar su derecho inherente a la autodefensa. La amenaza de capturar a los soldados y funcionarios de la única democracia de Oriente Medio y del único Estado judío del mundo es escandalosa”

Primer Ministro de Israel, Binyamin Netanyahu sobre la Corte Penal Internacional y su intención de poner a Israel en el banquillo de los acusados:

Ninguna decisión, ni en La Haya ni en ningún otro lugar, menoscabará en modo alguno nuestra determinación de lograr todos los objetivos de la guerra.

Bajo mi liderazgo, Israel nunca aceptará ningún intento de la CPI de socavar su derecho inherente a la autodefensa. La amenaza de capturar a los soldados y funcionarios de la única democracia de Oriente Medio y del único Estado judío del mundo es escandalosa. No nos doblegaremos ante ello. Israel seguirá librando hasta la victoria nuestra guerra justa contra los terroristas genocidas y nunca dejaremos de defendernos. Si bien la CPI no afectará las acciones de Israel, sentaría un precedente peligroso que amenaza a los soldados y funcionarios de todas las democracias que luchan contra el terrorismo salvaje y la agresión sin sentido.

“Hay que oír esto para creerlo. La Corte Penal Internacional de La Haya está contemplando emitir órdenes de arresto contra altos funcionarios militares y del gobierno israelí como criminales de guerra.

Esto sería un ultraje de proporciones históricas. Organismos internacionales como la CPI surgieron a raíz del Holocausto cometido contra el pueblo judío. Fueron creados para prevenir tales horrores, para prevenir futuros genocidios.

Sin embargo, ahora la Corte Internacional está tratando de poner a Israel en el banquillo. Está tratando de ponernos en el banquillo mientras nos defendemos contra terroristas y regímenes genocidas, Irán por supuesto, que trabaja abiertamente para destruir al único Estado judío.

Calificar a los líderes y soldados de Israel como criminales de guerra echará combustible para aviones a los fuegos del antisemitismo, esos incendios que ya arden en las universidades de Estados Unidos y en las capitales de todo el mundo.

También será la primera vez que un país democrático que lucha por su vida según las reglas de la guerra sea acusado de crímenes de guerra.

El ejército israelí, las FDI, es uno de los ejércitos más morales del mundo. Se necesitan infinitas medidas para evitar víctimas civiles, medidas que ningún otro ejército toma. Lo hace mientras lucha contra un enemigo terrorista que utiliza a sus propios civiles como escudos humanos.

Usted sabe la verdad. Hamás coloca sus armas, sus terroristas en hospitales, escuelas, mezquitas y en zonas civiles. Lo hacen para ganar inmunidad y maximizar las bajas civiles.

Así, mientras Hamás no muestra ningún interés por las vidas de los palestinos y roba la ayuda humanitaria destinada a los civiles, Israel está facilitando un aumento de la asistencia humanitaria a Gaza. Y hacemos esto para garantizar que se satisfagan las necesidades humanitarias de la población palestina.

En lugar de elogiar a Israel por respetar las reglas de la guerra mientras lucha contra un enemigo que viola todas las reglas de la guerra, incluido mantener como rehenes a 133 hombres, mujeres y niños israelíes, ¿a quién apunta la CPI? La democracia llamada Israel.

Y al atacar a Israel, la CPI estaría atacando a todas las democracias porque estaría socavando su derecho inherente a defenderse contra el terrorismo salvaje y la agresión sin sentido. Claramente, esta amenaza de la CPI no es un intento de hacer cumplir la ley.

Israel ni siquiera está sujeto a la jurisdicción de la corte y tiene un sistema legal independiente que investiga rigurosamente todas las violaciones de la ley. Más bien, este intento de la CPI es un intento de paralizar la capacidad misma de Israel para defenderse.

El gobierno y el pueblo de Israel rechazan rotundamente esta grave amenaza a nuestra seguridad. Esta grave amenaza a nuestra propia existencia.

Y quiero asegurarles que ninguna acción de la CPI afectará la férrea determinación de Israel de lograr los objetivos de nuestra guerra contra los terroristas de Hamas:

Destruiremos las capacidades militares y de gobierno de Hamas en Gaza, liberaremos a todos nuestros rehenes y nos aseguraremos de que Gaza nunca vuelva a representar una amenaza para Israel.

Israel espera que los líderes del mundo libre se opongan firmemente al escandaloso ataque de la CPI al derecho inherente de Israel a la autodefensa. Esperamos que utilicen todos los medios a su disposición para detener esta peligrosa medida.

Seis meses después de la terrible masacre de Hamás del 7 de octubre, ochenta años después de los horrores del Holocausto…

El Estado judío hace un llamado a las personas decentes en todas partes para que rechacen este ultraje de la CPI, para que apoyen a Israel mientras luchamos contra los bárbaros de Hamás e Irán, y mientras trabajamos para asegurar un mundo más pacífico.

 


Dr. Guido Maisuls
Servicio judío de opinión e investigación periodística
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