
UN INICIO DE AÑO CON UN MENSAJE DE UNIÓN Y ESPERANZA
“Que seamos capaces de transformar las dificultades del año que dejamos atrás en momentos dulces para el que comienza, y que aquellas lágrimas que nos acompañaron puedan convertirse en alegría y esperanza”. Con estas palabras, Claudio Epelman, director ejecutivo del CJL, abrió el brindis de celebración de Rosh Hashaná, organizado por el Congreso Judío Latinoamericano, conjuntamente con la AMIA y DAIA.
La tradicional conmemoración tuvo lugar en el Museo Nacional de Arte Decorativo, donde más de 300 invitados recibieron juntos el año nuevo judío 5786, que comienza este 22 de septiembre. La ceremonia incluyó símbolos característicos como las manzanas con miel, la jalá agulá y el resonar del Shofar, que recuerda la renovación espiritual y la continuidad de una tradición milenaria.
Osvaldo Armoza, presidente de la AMIA, agradeció a los presentes y remarcó: “En estos días, en los que pronto estaremos también compartiendo el Día del Perdón, recordamos que todos llevamos en nuestro corazón historias de aciertos y de errores, de alegrías y de momentos difíciles que debemos transitar. Y precisamente allí está el carácter especial de estas festividades: en la posibilidad de reparar, de reconciliarnos y de aprender. Pedir perdón a quienes hemos lastimado, ofrecer comprensión y tender puentes, nos ayuda a aliviar nuestras cargas emocionales, y a abrir espacio para la esperanza y para la posibilidad de superarnos”.
También se dirigió a los presentes el presidente de la DAIA, Mauro Berenstein. “La educación es la herramienta más poderosa para enfrentar el antisemitismo, no sólo en las aulas sino también en el espacio digital. En las redes sociales debemos trabajar con firmeza sobre los mensajes que se difunden y los símbolos que se utilizan, porque allí también se construyen sentidos y se multiplican prejuicios”, expresó.
Como ya es una tradición, el rabino Ioni Shalom, de la comunidad Bet Hilel, hizo sonar el Shofar, un instrumento con más de 3.000 años de historia que simboliza introspección y espiritualidad.
Entre las personalidades presentes se destacaron el ministro de Justicia Mariano Cúneo Libarona; el embajador de Israel Eyal Sela; el juez Mariano Borinsky; el fiscal Carlos Stornelli, el jefe de gobierno porteño Jorge Macri, el Secretario General de la Conferencia Episcopal Argentina es el Monseñor Raúl Pizarro, autoridades de las embajadas y consulados de Emiratos Árabes, Estados Unidos, Unión Europea, Jordania, Italia, Hungría, Francia, Panamá, Bulgaria, Suecia, Israel, Rumania, Ecuador y Brasil; el Intendente de Escobar Ariel Sujarchuk y los legisladores Juan Manzur, Diego Santilli, Daniel Lipovetzky y Fabián Perechodnik.
El encuentro permitió renovar los lazos de la comunidad judía en la Argentina y proyectar un mensaje de esperanza y cohesión social, destacando el valor de las tradiciones como fuente de fortaleza y como aporte a una convivencia plural y respetuosa.