El periodista Alejandro Bercovich justifica el silencio cómplice de la Agencia de la ONU, UNICEF, Cruz Roja, agrupaciones feministas y organizaciones de Derechos Humanos ante la masacre de Hamas del 7 de Octubre en Israel

Alejandro Bercovich:

Solo la verdad puede llevar justicia a las 85 víctimas, judías o no, del atentado a la AMIA. Creo humildemente que culpar a Unicef, a Bolivia, al feminismo y a los derechos humanos por estos 30 años de impunidad es mezclar todo para ocultar complicidades y justificar una masacre.

Canal Abierto:

“Hoy el titular de la AMIA y ayer Milei volvieron a insultar a los organismos de DDHH”

Alejandro Bercovich en el evento “Abrir los archivos del Estado para terminar con el pacto de impunidad y la historia oficial”, organizado por APEMIA en el 30 aniversario de la masacre de la AMIA.

Solo la verdad puede llevar justicia a las 85 víctimas, judías o no, del atentado a la AMIA. Creo humildemente que culpar a Unicef, a Bolivia, al feminismo y a los derechos humanos por estos 30 años de impunidad es mezclar todo para ocultar complicidades y justificar una masacre.

https://www.youtube.com/live/BG0deR5NVtk?si=lHuPDQRHtfRBk8Lj

 

Discurso del presidente de AMIA, Amos Linetzky, en el Acto Central

Nuestra tradición nos enseña a no permanecer ajenos ante el sufrimiento del otro. Dice el
Libro de Vaykrá -Levítico-, en Kedoshim לֹא תַ עֲמֹד עַל דַ ם רֵ עֶָך אֲנִי ה’
“No te quedarás quieto ante la sangre de tu prójimo. Yo soy El Eterno”
No podemos callar, ni mirar para otro lado cuando el prójimo nos necesita.
No vamos a olvidar ni a perdonar a las personas, organismos internacionales, organizaciones y movimientos sociales que dieron vuelta la cara, callaron o hasta apoyan la
barbarie terrorista.

Parece que no fueron suficientes las imágenes grabadas por los propios asesinos. Las violaciones y decapitaciones transmitidas en vivo y en directo. Los cuerpos calcinados de jóvenes y ancianos.

No fueron suficientes los armamentos encontrados en oficinas de organismos humanitarios supuestamente creados para brindar ayuda internacional, como ocurrió con la Agencia de la ONU, y la confirmada participación de varios de sus integrantes en los ataques.
No fueron suficientes los gritos desesperados de familiares para que la Cruz Roja pueda
llevar medicamentos a personas secuestradas que precisan tratamientos. Una Cruz Roja con tanta experticia histórica en la falta de compromiso… Una Cruz Roja que no visitaba los
campos de exterminio nazi, o lo hacía evitando preguntar por las cámaras de gas y
crematorios, emitiendo luego informes que no describían el horror. Siempre mirando para otro lado.

No fueron suficientes las decenas de mujeres mutiladas y vejadas frente a las cámaras, para que las agrupaciones feministas extiendan su sororidad cuando se trata de mujeres judías. Quizá la consigna de que el cuerpo de la mujer no debe ser un campo de batalla, o las tan nombradas “Te creo hermana” o “Ni una menos”, tengan una letra chica que no leímos y dice “salvo que seas judía”.

No fueron suficientes los niños asesinados o que quedaron huérfanos, para que Unicef
muestre algo de dignidad y algún mínimo grado de preocupación. ¿Dónde está UNICEF
reclamando por la devolución con vida de los hermanitos Bibas?

No es suficiente que más de 120 personas, incluyendo 7 argentinos, aún continúen
secuestradas en manos de asesinos, violadores, verdaderas inmundicias, para que las
organizaciones argentinas de defensa de los Derechos Humanos se expresen. ¿Qué están
esperando? ¿Por qué no reclaman junto a nosotros? Acaso… ¿Hay desaparecidos o
secuestrados por quienes no vale la pena reclamar?

https://amia.org.ar/2024/07/18/discurso-amos/

 


Dr. Guido Maisuls
Servicio judío de opinión e investigación periodística
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