
Ante las inminentes elecciones anunciadas en la AMIA, asoman desde hace tiempo los urgentes desafíos que deberá resolver el liderazgo judío en la Argentina.
Yo creo decididamente que uno de esos principales desafíos que acechan en los últimos tiempos a la comunidad judía de Argentina y del resto del mundo es la asimilación, un flagelo caracterizado por la progresiva pérdida de nuestra identidad y valores judíos.
Ante preocupantes niveles de disgregación y asimilación es necesario incentivar urgentemente la incorporación y participación activa dentro de los diferentes estamentos comunitarios a amplios sectores de una población judía que vive completamente alejada de la vida judía por carencia de motivaciones o de una plena conciencia sobre su identidad.
La comunidad judía argentina no podrá abstraerse de los dramáticos tiempos históricos que atraviesan a la República Argentina, a la sociedad argentina y a un mundo en perpetua crisis de valores, ideales y perspectivas.
En “Identidades” somos conscientes, que la comunidad judía argentina debe permanecer indisolublemente unida a su fe ancestral, a sus valores éticos y a sus irrenunciables vínculos con el Estado de Israel para poder realizarse plenamente como judíos pero a su vez necesita perseverar en ser plenos y orgullosos ciudadanos argentinos y asumir activamente todos los desafíos que nos demande nuestra sociedad argentina en la que somos parte y estamos indisolublemente inmersos.
Hoy y ante la profunda crisis estructural en lo político, económico, social, moral y cultural que afecta profundamente a la Argentina nos urge prepararnos y ocuparnos para afrontar las complejas circunstancias que nos demanda esta realidad.
¿Nos preocupa la asimilación en nuestras comunidades judías?